Introducción: La oligodoncia se refiere a la ausencia de seis o más dientes. Es un tipo de agenesia dental poco frecuente, rara que puede o no presentar asociación sindrómica. Objetivo: Describir las características clínicas y radiográficas de un caso clínico de Oligodoncia familiar. Caso Clínico: Paciente masculino de 12 años de edad con antecedentes de asma bronquial. Al examen clínico intraoral se observa la ausencia de los incisivos centrales inferiores y de los premolares evidenciándose un retardo en la cronología del brote. El examen radiológico reveló ausencia congénita de 12 folículos de dientes permanentes. Existen antecedentes de herencia materna de agenesia dental. Se diagnostica como una oligodoncia no sindrómica familiar. Conclusiones: El examen clínico bucal y radiográfico son esenciales para determinar las causas de oligodoncia y descartar cualquier asociación sindrómica, lo que contribuye a elaborar un tratamiento oportuno dirigido a devolver la función y la estética al paciente.
Durante el proceso de formación del germen dentario pueden ocurrir diversas alteraciones locales en los fenómenos de inducción y diferenciación de la lámina que los compone. En este sentido, son comunes las variaciones en el número de dientes tanto en aumento como en disminución. 1,2
A esta última se le denomina agenesia dental, la cual incluye otros términos según la cantidad de dientes que se encuentren ausentes, entre estos: la anodoncia o ausencia total, que suele presentarse como parte de algún síndrome o trastorno. La hipodoncia, cuando faltan menos de seis estructuras dentarias, generalmente se manifiesta en forma aislada y única; y la oligodoncia también conocida como anodoncia parcial o anodoncia severa o avanzada, 3 que se refiere a la ausencia de seis o más dientes en la dentición primaria y/o permanente excluyendo los terceros molares. 4
Se le considera una condición muy rara debido a los rangos bajos que muestra (0,03% a 0,07%) 3,4,5,6. Se observa más en el sexo femenino 5,7 que en el masculino. Cualquier diente puede estar ausente y existe más afectación en la dentición permanente que en la temporal. 6
Varios autores coinciden en que son los incisivos laterales maxilares los que con más frecuencia se encuentran ausentes seguido de los segundos premolares mandibulares (sin tener en cuenta los terceros molares). 4,5,6
Los pacientes con oligodoncia suelen tener limitaciones en sus relaciones sociales pues se muestran psicológicamente afectados debido a las repercusiones estéticas, oclusales e incluso de su dicción. En este sentido es imprescindible el conocimiento de sus características para arribar al correcto diagnóstico que constituye la base del éxito del tratamiento. Con referencia a lo anterior, el descubrimiento temprano de agenesias en dentición permanente no se podrá confirmar hasta que se alcance la edad de seis años; principalmente el segundo premolar inferior debido a que presenta una considerable variación en el comienzo de su calcificación.6
Esta anomalía puede presentarse como una característica aislada no sindrómica familiar como un hallazgo poco frecuente o como una condición aislada ligada a mutaciones en los genes AXIN2, PAX9 y MSX1 3,5,6. También puede estar determinada por alteraciones que tienen lugar durante los estadios iniciales del desarrollo dentario como traumas, radiaciones, desórdenes metabólicos o infecciones localizadas. Estos factores se dividen en generales y hereditarios.
Se llevó a cabo una revisión bibliográfica en los sitios Medline, Pubmed Lilacs y Scielo, se utilizaron como descriptores: agenesia dental, hipodoncia, oligodoncia y oligodoncia no asociada a síndromes.
Se cumplieron los postulados de la ética y se procedió con el consentimiento informado de los padres. Se realizó radiografía tomando las medidas de protección pertinentes.
El trabajo que se muestra tiene como objetivo fundamental describir las características clínicas y radiográficas de un caso clínico de Oligodoncia no sindrómica o familiar por lo infrecuente y raro de su aparición, así como la importancia de su diagnóstico para un tratamiento oportuno dirigido a devolver la función y la estética al paciente.
Paciente masculino de 12 años de edad con antecedentes de asma bronquial, que acude a la consulta de estomatología general integral por la preocupación de la madre debido a la ausencia clínica del 31 y 41 pasada la edad del brote. Al interrogatorio esta refiere que tanto ella como varios miembros de su familia, presentan ausencia de dientes permanentes.
Examen clínico extraoral: Sin alteraciones apreciables. No presenta signos como pelo fino, ralo o escaso, piel y uñas normales; características de los diferentes síndromes que pudieran estar asociados a esta entidad.
Examen facial: paciente mesoprosopo,(mesofacial) de cara ovoide, perfil recto e incompetencia labial. Tercio inferior de la cara disminuido, ángulo nasolabial recto y surcos nasogenianos borrados.
Examen clínico intraoral: Existe mordida abierta anterior de origen dentario, vestibuloversión de incisivos superiores y ausencia de varios dientes permanentes. Se observan brotados completamente en el maxilar los siguientes dientes: 11, 12, 13,16, 21, 22, 23 y 26. Temporales presentes 55 y 65. En la mandíbula los permanentes brotados son: 32, 33, 36, 42, 43 y 46. Temporales presentes: 74, 75 y 84. Se aprecia la ausencia de los dos incisivos centrales inferiores y de las bicúspides permanentes que deberían haber brotado. Como promedio, a los 12 años, ha de completarse la erupción de toda la dentición.
Se realizó ortopantomografía a los 11 años de edad momento en que acudieron por vez primera a la consulta, luego a los 12 años retoman el tratamiento. Ver (Figura. #2) que nos permite constatar la oligodoncia de 12 dientes permanentes, sin considerar los terceros molares. En brote intraóseo 27 y 35. En brote submucoso 13, 23, 33 y 43, que ya a los 12 años están completamente brotados. Además, la ausencia de 14, 15, 17, 24, 25, 31, 34, 37, 41, 44, 45 y 47. Lo que confirma el fallo en la morfogénesis de varios órganos dentales.
Los dientes que se observan en la radiografía son:
Permanentes: 11, 12, 13, 16, 21, 22, 23, 26, 27, 32, 33, 35, 36, 42, 43, 46.
Temporales: 54, 55, 65, 72, 73, 74, 75, 82, 84 y 85
Están ausentes: 14, 15, 17, 24, 25, 31, 34, 37, 41, 44, 45 y 47
La agenesia dental congénita constituye una anomalía común en los seres humanos. Su diagnóstico se establece al observar la demora en el cambio de algún diente temporal así como la ausencia clínica de un permanente. Sin embargo este solo se puede corroborar con el examen radiológico, diferenciando entre la ausencia real del germen y la no presencia por aún no estar en periodo de calcificación, o estar retenido. 3,8
La oligodoncia constituye una anomalía de número de la formula dentaria que tiene una baja prevalencia y es considerada una condición muy rara que afecta a aproximadamente al 0.1% - 0.3% de la población 4,5,6,8. Su etiología es multifactorial y tienen gran influencia factores inherentes al pacientes como: condiciones sistémicas, raquitismo, disturbios intrauterinos severos, inflamaciones localizadas y otros de origen ambiental, entre ellos: las radiaciones, quimioterapia, factores nutricionales, hormonales, endocrinos, tumores, traumas e infecciones virales como la rubeola. 4,5,9,10
La herencia constituye otro de los principales factores influyentes 3,4,5. Varios estudios 4,7 evidencian la presencia de un gen autosómico dominante o recesivo ligados al cromosoma Y o X. Mutaciones en los genes: PAX9, MSX1, EDA, AXIN2 y WINT10A se relacionan con esta condición y más específicamente el MSX1 y PAX9 son los que muestran mayor asociación con la oligodoncia no sindrómica familiar 5,11. Ellos participan en el proceso de morfogénesis del órgano dental, en la formación del epitelio mesenquimatoso del folículo dental durante la embriogénesis. Se ubican en los cromosomas 4 y 14 respectivamente. 5 El paciente muestra una posible asociación genética debido a que la madre y otros miembros de su familia refieren ausencia de dientes. Para esto se requeriría de estudios genéticos más específicos.
Esta anomalía se clasifica en aislada o no sindrómica y sindrómica o asociada a síndromes 3,4, tales como: la displasia ectodérmica, la microsomía hemifacial, el síndrome de Down, el de Witkop, el de Rieger, el de Wolf- Hirschhorn, el de Vander Woude, el de Fried, el de Hirschhorn, labio y paladar fisurado, displasias pelo-uña-piel-dientes, incontinencia pigmentaria. En este tipo de pacientes se presentan una serie de alteraciones como piel seca, trastornos en los ojos, oídos, las uñas, cabello fino y escaso, disminución de la sudoración y la salivación. En el caso presentado no se observan ninguna de estas características en el examen extraoral ni se ha corroborado por ningún especialista la presencia de algún síndrome.
Varios estudios 12 demuestran que regularmente tiende a presentar agenesia el segundo elemento de cada grupo dentario. El caso expuesto coincide con estos, pues están ausentes los segundos premolares y segundos molares permanentes.
Son disímiles los autores 5,6,9,13 que refieren que es el incisivo lateral superior el diente que con más frecuencia se encuentra ausente después de los terceros molares. Sin embargo otros como Peck’s y Canut refieren que es el segundo premolar inferior.
En el caso presentado, se observa ausencia del segundo premolar mandibular derecho y sí posee los incisivos laterales superiores. Sin embargo ambos incisivos centrales inferiores están ausentes, los cuales poseen impacto en la estética. Entre las alternativas de tratamiento se encuentran la colocación de implantes o prótesis si existe el espacio necesario.
La oligodoncia constituye un problema de salud pública ya que los pacientes con este tipo de alteración presentan anomalías dentomaxilofaciales, reducción de la capacidad masticatoria y un evidente compromiso de la estética. Además de que afecta el patrón de comportamiento y las relaciones sociales 4,5,8,10. En varias investigaciones 4,5,7 se plantea que la ausencia de dientes impide el correcto desarrollo de los maxilares y provoca un exceso de espacio en las arcadas dentarias.
Esto trae consigo una repercusión negativa para la salud bucal, general así como en el comportamiento de las personas en el medio que las rodea, pues las implicancias estéticas, funcionales y del habla se convierten en obstáculos psicológicos que se consolidan más a medida que pasa el tiempo. El estudio realizado corrobora lo anterior pues a medida que el paciente ha ido desarrollándose se ha observado un comportamiento más retraído así como mayor limitación de sus relaciones sociales.
Es necesario en este tipo de pacientes, realizar un diagnóstico oportuno donde se lleve a cabo un completo estudio clínico-radiológico y se confeccione una completa historia clínica para así tratarlos adecuadamente y muchas veces auxiliándose de la multidisciplinariedad, es decir, que se necesita de un trabajo en conjunto por parte de ortodoncistas, protesistas e incluso cirujanos maxilofaciales.
Se hace necesario profundizar en las causas de estas anomalías dentarias mediante la ampliación de los estudios genéticos en el paciente y los demás miembros de la familia que la refieren. Además profundizar en la búsqueda de otras alteraciones sistémicas por su posible asociación que complejiza aún más su manejo.
En este estudio se determinó mediante el interrogatorio y examen clínico a la madre del paciente que tanto ella como varios miembros de su familia presentaban oligodoncia pero nunca recibieron tratamiento. Se deben aprovechar el advenimiento de la tecnología moderna e incrementar los estudios genéticos y moleculares para lograr un mayor conocimiento sobre las causas de la oligodoncia así como su asociación con algunas patologías sistémicas.
El examen clínico bucal y general además de un adecuado examen radiográfico son elementos claves en pacientes con oligodoncia sobre todo para descartar cualquier asociación sindrómica y para determinar sus causas lo que contribuye a llevar a cabo el tratamiento oportuno dirigido al restablecimiento de la función y la estética. Este tipo de investigación contribuye al mejoramiento de la calidad de los servicios de salud e incentiva el potencial investigativo de los profesionales.